Betanzos – Bruma, en el ayuntamiento de Mesía. Una de las etapas más exigentes de todo el recorrido que llevamos realizado. No es que tenga dificultad, pero si exigencia de subidas. Prevenir si hay un día de mucho calor. El tramo más exigente está entre San Paio de Vilacoba y A Malata, entre el km. 14 y 21.
Es una etapa que debes de planificar muy bien, ya que no tienes muchos servicios, y sobre todo en la parte casi última, desde el embalse de Beche y As Travesas. La etapa tiene bastante asfalto.

Empezamos en Betanzos en la plaza Hnos. García Naveira. Vamos buscando la calle do Rollo, hasta cruzar el puente de As Cascas, superviviente de casualidad de la guerra contra los soldados de Napoleón. Nada más cruzarlo empieza la primera subida arriba. Pasaremos por tres iglesias. Hay un lugar intermedio de la etapa, antes de llegar a la iglesia de Santa Eulalia de Leiro, un mesón, Xente no camino, un lugar donde recargar fuerzas o sino en el embalse de Beche, ya no habrá nada hasta As Travesas, el Bar de Avelina, regentado por dos hermanas muy atentas con los peregrinos.

El primero de los templos que vamos a encontrar es San Estevo de Cos, a los 7,5 km., el siguiente será el Santuario de Nuestra Señora de la Saleta, llamada oficialmente Santa María de Presedo. No se pasa al lado el Camino, hay que desviase unos 100 metros, está justo en el Km. 11,5. El siguiente templo será la iglesia de Santa Eulalia de Leiro, el Camino pasa al lado. Nos encontraremos en el kilómetro 13,6 km. Y el Km. 21,6 donde se encuentra el Bar Avelina se encuentra una capilla humilde, en As Travesas, en el bar sellan con su sello y suelen tener la llave para poderla visitar.

Después de As Travesas sólo quedaran apenas 3 km. para llegar a Bruma, a la altura del albergue de Bruma. Un poco más adelante se encuentra la Capilla de San Lourenzo, que es lo que queda del antiguo hospital de peregrinos que existió en tiempos medievales.